La plagiocefalia: ¿Qué es y cómo actuar?

La llegada de un bebé al mundo es un momento maravilloso para los padres, pero también viene acompañado de la responsabilidad de velar por su salud y bienestar.

Una condición que puede surgir en algunos bebés es la plagiocefalia, una deformación del cráneo que puede generar preocupación en los padres.

Exploraremos qué es la plagiocefalia, sus causas y las opciones de tratamiento disponibles.

¿Qué es la plagiocefalia?

La plagiocefalia se refiere a una alteración en la forma del cráneo del bebé, que puede manifestarse como una asimetría o aplanamiento en una zona específica. Existen cuatro tipos de deformaciones craneales:

  • Plagiocefalia: La cabeza es plana de un lado.
  • Braquicefalia: la cabeza es más ancha de lo normal.
  • Escafocefalia o dolicocefalia: la cabeza es más larga y estrecha de lo normal.
  • Trigonocefalia: la cabeza adopta la forma de triangulo
  • La tortícolis congénita puede también producir alteraciones en la forma del cráneo.

Estas deformaciones se pueden acompañar de craneosinostósis cuando hay fusión prematura de una o más suturas craneales o ser posicionales cuando el cráneo se deforma de manera asimétrica por causas externas.

Fascia Integral Tenerife | Especialista en osteopatía y terapia cráneo sacral avanzada

Plagiocefalia posicional

La plagiocefalia posicional es la más común pues aparece en un 40% de los recién nacidos y suele ser causada por la presión constante o la posición repetitiva de la cabeza del bebé. Por ejemplo, si el bebé siempre duerme en la misma posición o pasa mucho tiempo apoyando la cabeza en una superficie dura, puede producirse una deformación del cráneo, en otras ocasiones se produce por fuertes presiones durante el parto o por posiciones prolongadas durante la vida intrauterina.

En los casos más leves un seguimiento por parte de los padres en casa puede ser suficiente, son una serie de medidas bien sencillas que incluyen:

  • Cambiar la posición: es importante alternar la posición del bebé durante el sueño y la vigilia para evitar la presión constante en una zona específica de la cabeza. Girar la posición de la cabecita del bebé de un lado a otro puede ayudar a distribuir de manera equilibrada la presión.
  • Tiempo boca abajo supervisado: proporcionar al bebé períodos cortos de tiempo boca abajo, siempre bajo supervisión, puede ayudar a fortalecer los músculos del cuello y la cabeza, así como a prevenir el aplanamiento en la parte posterior.
  • Almohadas y dispositivos especiales: en algunos casos, se pueden utilizar almohadas o dispositivos específicos como los recomendados por el pediatra y otros relacionados con la Terapia Craneosacral, para ayudar a mantener la forma adecuada del cráneo.

Terapia Craneosacral para la plagiocefalia posicional

En los casos de la plagiocefalia posicional y otros tipos de deformidades craneales, la Terapia Craneosacral es de gran ayuda especialmente en los casos más severos y también en los más leves. La Terapia Craneosacral trabaja con un tacto muy suave, no más de 5 gramos, lo que viene a ser el peso de una moneda de 20 céntimos. Por lo que está especialmente indicada para trabajar con bebés, recién nacidos e incluso prematuros.

Se presta atención tanto a la cabeza como a la cara del bebé, buscando y relajando tensiones y asimetrías, tanto a nivel de las suturas, como de las articulaciones y las membranas craneales. Observar y tratar la relación de la cabeza con el cuello, tórax, columna vertebral y extremidades es también de gran importancia. Durante las sesiones se pueden incluir ejercicios y técnicas para fortalecer los músculos del cuello y la cabeza, mejorar la postura y favorecer un desarrollo motor adecuado, y que permitan a los padres seguir algunas pautas para ayudar a corregir la deformación del cráneo.

En los casos más severos (la gran mayoría ya vienen con el diagnóstico del uso de casco ortopédico por parte del pediatra) se puede conseguir que el bebé no necesite el uso de dicho casco. En estas situaciones el número de sesiones es mayor en torno a las 6-10 sesiones dependiendo de la severidad. La secuencia de las sesiones es de una vez a la semana.

Casco ortopédico

Habitualmente en casos más severos de plagiocefalia posicional, el pediatra va a recomendar el uso del casco ortopédico para moldear y redirigir el crecimiento del cráneo.

El casco se personaliza según las necesidades individuales del bebé y lo deben llevar 23/7, entre 2 y 6 meses, no antes de los 4 meses o después de los 15 meses. El uso de la ortésis craneal está en entredicho desde hace varios años con la aparición de varios artículos tanto en el Reino Unido donde se alerta del exceso de recomendaciones de casco ortopédico y su relación coste/beneficio. En Holanda existen estudios científicos que no recomiendan su uso debido a los bajos resultados y los efectos secundarios que producen. Aunque su bebé ya esté utilizando casco ortopédico, la combinación con la Terapia Craneosacral puede ayudar a recortar de manera significativa los tiempos de uso.

Plagiocefalia craneosinostótica

Por otro lado, la plagiocefalia craneosinostótica es menos común, y se debe a la fusión prematura de las suturas del cráneo. Las suturas son las uniones flexibles entre los huesos del cráneo de un bebé, y su fusión temprana puede afectar el crecimiento normal del cráneo, generar deformidades y disfunciones neurológicas. Este tipo de plagiocefalia requiere atención médica especializada y tratamiento quirúrgico. El objetivo de la cirugía es liberar las suturas fusionadas y permitir el crecimiento adecuado del cráneo. Esta intervención generalmente se lleva a cabo por un cirujano pediátrico especializado en cirugía craneofacial. En estos casos la Terapia Craneosacral puede ser de gran beneficio especialmente después de la operación para mantener en estado óptimo las diferentes estructuras involucradas, así como prevenir inflamaciones y tensiones derivadas de la operación y revitalizar el tejido cicatricial.

Métodos de prevención

En cuanto a la prevención, es fundamental fomentar una postura adecuada desde el nacimiento. Además de seguir las pautas mencionadas anteriormente, es esencial fomentar la estimulación y el movimiento del bebé para que no permanezca en la misma posición durante períodos prolongados.

Si como padre o madre sospechas que tu bebé puede tener plagiocefalia o si la asimetría en el cráneo no mejora con las medidas mencionadas, es importante buscar ayuda médica. Un pediatra u osteópata pediátrico podrá evaluar adecuadamente la condición y recomendar el tratamiento apropiado en caso necesario.

La plagiocefalia es una condición relativamente común en bebés y puede generar preocupación en los padres. Es importante comprender que existen diferentes tipos de plagiocefalia y que el tratamiento varía según el caso. Con medidas sencillas, como cambios de posición y tiempo boca abajo supervisado, la plagiocefalia posicional puede llegar a corregirse por sí sola. Sin embargo, siempre es recomendable buscar orientación médica para obtener un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento adecuado para garantizar la salud y el bienestar de tu bebé.

Si tienes alguna preocupación acerca de la plagiocefalia o cualquier otro aspecto de la salud de tu bebé, no dudes en pedir cita en Fascia Integral.

Fuentes:

Clínica Universidad de Navarra

healthychildren.org

European Craniofacial Medical Center

Asociación Española de Pediatría

https://www.bbc.com/news/health-27223772

https://www.bmj.com/content/348/bmj.g2741

Eficacia de la terapia manual pediátrica en el tratamiento de la plagiocefalia deformacional posterior

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